martes, 11 de marzo de 2014

Espera...

Y aunque cueste encontrarte de nuevo, no pierdo la esperanza. A sabiendas de una esperanza de caracter activo porque en la pasividad, no se encuentra.
Y aunque ya no somos los de antes, hay cosas que se mantienen intactas. Eso denominado esencia, sé que no cambió en ninguno de los polos.
Y aunque hoy pareciéramos ser perfectos desconocidos, sé que la perfección no existe... Y en definitiva desconocidos no somos.
Y aunque duela, queme y el tiempo se escurra como arena entre los dedos, te espero.
Te quiero y te espero. Siempre.